La mitad de nuestros errores en la vida, vienen del hecho de que nos dejamos llevar por los sentimientos cuando deberiamos razonar, o de que razonamos, cuando deberiamos dejarnos llevar por los sentimientos
sábado, 13 de diciembre de 2008
"El óxido se posó en mi lengua, con el sabor de una desaparición..."
Antonio Gamoneda.
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Si me lo permites, añado un poco más. Merece la pena:
El olvido entró en mi lengua y no tuve otra conducta que el olvido,
y no acepté otro valor que la imposibilidad.
Como un barco calcificado en un país del que se ha retirado el mar,
escuché la rendición de mis huesos depositándose en el descanso;
escuché la huida de los insectos y la retracción de la sombra al ingresar en lo que quedaba de mí;
escuché hasta que la verdad dejó de existir en el espacio y en mi espíritu,
3 comentarios:
Si me lo permites, añado un poco más. Merece la pena:
El olvido entró en mi lengua y no tuve otra conducta que el olvido,
y no acepté otro valor que la imposibilidad.
Como un barco calcificado en un país del que se ha retirado el mar,
escuché la rendición de mis huesos depositándose en el descanso;
escuché la huida de los insectos y la retracción de la sombra al ingresar en lo que quedaba de mí;
escuché hasta que la verdad dejó de existir en el espacio y en mi espíritu,
y no pude resistir la perfección del silencio...
Claro que merece la pena... Y se le agradece mucho el comentario. Un saludo
Es de Gamoneda, no? El amigo de Zapa...pero suena muy bien, es más, incluso me gusta.
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